El mundo es como Robben*

"Hay quienes ven las cosas como son y se preguntan ¿Por qué? Yo sueño con cosas que nunca fueron y me pregunto ¿Por qué no?

-Robert Kennedy

"Aquellos que compararon nuestras vidas a un sueño tenían razón...dormíamos despiertos y depertábamos dormidos"

-Michel de Montaigne

Yo vivo en los dos mundos. El que se pregunta ¿Por qué? Y el que se pregunta ¿Por qué no? 

 Busco mi lugar en  la maraña de cosas. Un lugar donde pueda contribuir, aunque sea con un grano de arena, para que las cosas cambien.

Pero que no se confunda nadie. Soy un optimista, porque ser optimista , según mi propia definición, es creer que las cosas pueden mejorar, porque deben hacerlo.

Lo que no me gusta es ser manipulado y en la realización que lo estoy siendo, tal vez me he vuelto un poco paranoico. Pero mejor así. Me mantiene alerta.  Soy paranoico por opción y vocación, pero no por una patología (pienso yo).

Así que, mientras sueño con un mundo mejor, me mantengo bien despierto observando la realidad y no todo lo que veo es malo, para nada.  

Soy de la idea que nuestras cualidades siempre van a trabajar en nuestro favor, por eso tenemos que trabajar en superar nuestras  falencias. Si un jugador zurdo, como Robben, trabajara sobre su derecha, sería más que un gran jugador, sería un fenómeno. Por eso recalco  lo negativo, porque es lo requiere ser corregido.

Mirar hacia el futuro, siempre, porque como dijo George Burns, "es el lugar donde nos toca vivir", pero aprendiendo del pasado y pisando fuerte en el presente. El mundo es como Robben, un zurdo al que hay que mejorarle la pierna derecha.

(*) Arjen Robben, jugador Holandés, del Real Madrid.

La imagen del día.

"La historia es la memoria de los pueblos y sin memoria, el hombre se rebaja a ser como los animales inferiores"

-Malcom X

"La Historia es la suma total de eventos que pudieron ser evitados"

-Konrad Adenauer

"Aquellos que no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo"

 -George Santayana

Siempre me produjo desconfianza cualquier discurso que dice que no hay que mirar hacia atrás. Es como esconder el polvo debajo de la alfombra, no se ve, pero está. Recordar y conocer la historia es lo que puede evitar que se repitan errores y horrores. Mirar hacia adelante, sí, pero recordando el pasado.

¡ No dispare, soy humano !

"El llamado a  salvar a la humanidad es casi siempre un falso frente para imponer dominio"

-H.L.Mencken

"A mi modo de ver, la humanidad de nuestro mundo puede ser medida frente al destino de África"

-Horst Koehler

"En la granja, todos los animales son iguales. Pero hay algunos más iguales que otros"

-George Orwell

Se ha vuelto tan escaso el atributo  humanidad que se ha convertido en una cualidad y no siempre una cualidad positiva.

En el mundo de los negocios, cuando un jefe es tildado de humano, es un eufemismo para indicar que es débil. Se preocupa demasiado del bienestar de sus empleados en desmedro de los objetivos de la empresa.

En el resto de la vida, añadimos el adjetivo humano para describir una persona sensible hacia las penurias y necesidades de los demás, preocupada por los otros seres humanos, incluso hacia los animales.

Pero, ¿Qué tan humanos somos los seres humanos?

Me da la impresión que somos humanos de manera intermitente, dependiendo de lo que estemos haciendo, la actividad que estemos desarrollando o con quien nos estemos relacionando. Casi siempre somos humanos por condición, pero no por vocación.

Nos preocupamos de nuestra mascota, pero somos incapaces de dar albergue a un perro callejero o dejar de consumir productos cosméticos que experimentan con animales.

 Hacemos donaciones a muchísimas instituciones humanitarias pero no hacemos nada para no consumir productos elaborados a partir del abuso  infantil, sueldos de subsistencia o dilapidación de la naturaleza. Nos preocupamos por el bienestar de los cercanos, pero lo que sucede lejos (y lejos a veces es muy cerca) es sólo parte de un documental que nos encontramos haciendo zapping en la TV.

Y podríamos decir en nuestro favor, que realmente no podemos preocuparnos de todo. Que el día a día nos absorbe tanto y nuestros recursos son tan limitados, que nuestras acciones deben limitarse a lo más próximo. Y es válido. 

Pero es cuestión de actitud. A veces bastaría con decir algo, alzar la voz y verbalizar nuestro descontento. No quedarnos como meros observadores y exigir, a aquellos que han asumido ciertas obligaciones sociales, que hagan algo al respecto.

Pero, ¿Cómo se hace en un mundo repleto de mensajes contrapuestos? ¿Hay moralidad en sostener derechos de unos en desmedro de otros?

Los gobiernos, que basan sus plataformas políticas en el bienestar, el respeto por los derechos y justicia para todos y que por otro lado comercian con países que violan estos mismos derechos. La complicidad del sistema político en el abuso de empresas hacia el medio ambiente. La pasividad de las naciones ante países que gastan la misma cantidad en armamento de lo que han recibido en ayuda humanitaria, sin mencionar que estas armas salen de los mismos países que dan "ayudas humanitarias". Genocidios que se han cometido mientras la sociedad de las naciones discuten si es apropiado o no intervenir. Administraciones que nada hacen para aliviarle la vida urbana a miles de discapacitados, presos de su incapacidad. Una sociedad que opta por la hambruna antes que dejar caer los precios.

Estamos tan alejados de nuestra naturaleza, que tenemos que  usar los términos humano o persona como adjetivos para diferenciar a unos de otros.

Ayuda humanitaria..¿Hay otro tipo de ayuda? 

Tal es la diferenciación de lo que debe o no debe ser humano, que hemos creado unos derechos especiales para los humanos. Los Derechos Humanos. ¿No deberían ser todos los derechos humanos? Pero por alguna razón, es conveniente que no sea así. Y es tan así, que los que constantemente reclaman por la humanización de la sociedad, son tildados de trasgresores y enemigos del sistema.

Cuando entendamos, que nuestra misión en la tierra es la preservación de la especie, el cuidado de las otras y del medio en que vivimos, podremos eliminar la palabra humano como adjetivo y dejarla como un sustantivo, cuya definición simplemente es, un ser que forma parte de la humanidad, un huésped más del planeta que habitamos.

Sí, creo. Seré como Michael Jordan.

"El beneficio no es el legítimo propósito de un negocio. El legítimo propósito de un negocio es ofrecer un producto o servicio que la gente realmente necesite, y hacerlo tan bien, que sea beneficioso"

-James Rouse

Si uso unas Nike Air, ¿ Podría llegar a jugar basket como Michael Jordan?,

Las corporaciones han establecido una nueva religión: El Negocio y su acción de adoctrinamiento es llevada a cabo por las campañas que publicitan sus productos. Como toda religión, precisa de santuarios donde profesar la nueva fe. Los Centros Comerciales (Malls, Shoppings, etc..), grandes e impresionantes estructuras donde los fieles acuden a realizar el rito más importante de esta religión que es comprar. De la misma manera que el cristianismo empezó a trasmitir sus ceremonias a través de la TV, la nueva religión del negocio da un paso adelante, permitiéndole a sus fieles a participar de su "sacramento" mediante ventas de TV e Internet. Pero los Centros Comerciales son, sin duda, sus catedrales. No me cabe la menor duda: El Negocio es la nueva creencia , las corporaciones son su nuevas Iglesias , los ejecutivos sus nuevos sacerdotes, la publicidad su evangelio y los Centros Comerciales son sus santuarios.

La inteligencia concentrada de las Corporaciones está dedicada a lograr un solo propósito, el beneficio y esto hay que lograrlo a cualquier costo. 

A los fieles hay que convencerlos que hay que consumir siempre, constantemente creando productos y, lo que es más importante, creando la necesidad de consumirlos. Si no consumes, te alejas de la congregación, te marginas de la mayoría y te produce la sensación de haber pecado. Sí, sí, la nueva religión tiene pecados, y el más grave es no consumir. Para esto, el bombardeo publicitario se encarga de recordar sin pausa que hay que consumir para mantenerse en estado de pureza.

Mientras que las religiones tradicionales ofrecen maneras de arrepentirse, El Negocio ofrece maneras de evitar el pecado. Su arma predilecta, el crédito.

A través del crédito (tarjetas de crédito), el feligrés puede mantenerse en estado de gracia consumiendo, difiriendo el pago del bien de consumo y así, a los ojos de la congregación, no peca. Una genialidad. De hecho, es como si los católicos pudieran comulgar por adelantado, aprovechando su más reciente confesión. El estado ha abrazado esta nueva religión de modo incondicional, porque a través de los impuestos (IVA, entre otros) participa directamente en el sacramento del consumo.

El problema viene cuando el feligrés no puede pagar. Es entonces que empiezan a operar todos los agentes de cobranza, listas negras que se hacen públicas, y el acoso es total. La nueva Inquisición.

A diferencia de muchas religiones tradicionales, que son manifestaciones culturales de una creencia, El Negocio es absolutamente universal, sólo cambia el idioma y la moneda. 

Cuando el presidente del Banco Mundial dice que África es un continente "perdido" está simplemente diciendo que no se vislumbra, que la mayoría de su población, se puedan convertir en posibles consumidores. Son los nuevos pueblos paganos. ¿Para qué ayudarlos?

Pero se me olvidó mencionar que, como toda religión, precisa de un dios. Ese dios es el beneficio y todo es válido con tal de honrarlo. Contaminar, usar trabajo sub pagado, explotar el trabajo infantil, usar materias primas deficientes, sobre cobrar, sobornar, y usar al poder político como su principal socio, perdón, evangelizador. Es decir, cero contemplación hacia el individuo, cuya única función en esta nueva religión, es consumir.

Así que esta noche, antes de dormir, sujetaré fuertemente mi MasterCard y alzaré mi plegaria:

" Nike nuestro, que estás en el Mall, santificado sea tu nombre. Prometo que mañana iré al Mall y cueste lo que cueste, compraré unas Nike Air, porque creo firmemente en la promesa de tu publicidad. Amén"

Tal vez mis oraciones sean escuchadas y logre jugar como Michael Jordan.

¡Hasta los huevos!-

"Si para hacer una tortilla hay que romper huevos,  por favor, que no sean los míos"

-Propio.

"Quien controla el pasado, controla el futuro. Quien controla el presente, controla el pasado"

-George Orwell

Los que hemos estado un rato en este planeta hemos vivido varios cambios en lo que a alimentación se refiere. Lo que alguna vez era bueno comer , se convirtió en malo y después de un tiempo, en bueno otra vez. Para ejemplo, un botón. Los huevos.

Aún recuerdo las titánicas luchas que sostenía mi madre con mi hermana para que se tragara un huevo frito. No había forma. Pero mi madre insistía en que era necesario para su alimentación.

Años más tarde, ya con los riesgos hepáticos y cardiovasculares, el huevo se convirtió en el enemigo número uno. Luego resultó que sólo había que comer claras y no yemas. Entonces llegaron los huevos con Omega3 y actualmente, el huevo vive su mejor momento. Es ampliamente recomendado para la alimentación diaria. Hasta hoy. Los especialistas ahora dudan de los beneficios cardiovasculares del famoso alimento.

Y así ha pasado con el aceite de oliva, el vino, verduras rojas, frutas, el chocolate, el café, etc...

La verdura de moda es el espárrago...subirán de precio, sin duda.

Los alimentos procesados deben llevar una amplia explicación de sus nutrientes, aditivos, cantidad de colesterol, grasas, etc.. Ir al supermercado requiere de un tiempo importante, si se quiere leer la explicación de cada alimento. ¿No deberían los productos "naturales",cómo frutas y verduras, también llevar una detallada información acerca de sus componentes, incluyendo abonos, insecticidas, etc..?

Pronto, cada almacén y supermercado tendrá que tener a un nutricionista que informe sobre las bondades o peligros de los alimentos que consumimos.

Tenemos los alimentos orgánicos, supuestamente cultivados sin aditivos, insecticidas, etc.. pero también es cierto, que estos alimentos requieren de espacios más grandes para ser cultivados, lo que significa que deben ser talados más árboles para crear estos espacios, lo que resulta en una mayor deforestación del planeta. Con los alimentos orgánicos comemos más sano, pero será por menos tiempo, porque si nos quedamos sin bosques, nos quedamos sin planeta.

¿Qué hacer? ¿Cómo saber si lo que hoy se nos recomienda como sano, mañana no será nocivo para la salud? ¿Cuánto tiempo durará la bondad de la famosa "dieta mediterránea"?(Que no es pasarse un mes en las islas griegas).¿ Podemos demandar a aquellos que nos dijeron que algo era bueno y ahora es malo?

Me preocupa que gran parte de la investigación alimenticia sea llevada a cabo por laboratorios, cuyo único propósito es crear drogas.

Hasta no hace mucho, la medicina tradicional tildaba a la medicina alternativa como "herejía", casi como charlatanería barata. Eso está cambiando, y no porque se haya alcanzado un mayor nivel de apertura en este sentido, si no que los grandes laboratorios, y grupos económicos importantes, han ingresado al mundo de la medicina "natural". Vitaminas, Ginseng, anti oxidantes, reductores naturales de colesterol, etc... son ampliamente encontrados en las farmacias tradicionales. Ahora es negocio.

Así que trataré de hacerle caso a mi cardiólogo, a mi homeópata y a los cientos de artículos sobre nutrición que aparecen todos los días, y espero pacientemente ese día cuando alguien descubra que un buen helado de chocolate, con crema chantilly y dulce de leche sea bueno para la salud. Seguramente será resultado de un detallado estudio efectuado por Hagen Dazs.

En el fondo, Jesús.

"No hay necesidad de templos, ni de filosofías complicadas. Mi cerebro y mi corazón son mis templos, mi filosofía es la bondad"

-Dalai Lama

"Me gusta su Cristo, pero no sus cristianos. No se parecen en nada a su Cristo"

-Mohanda Gandhi

Como es propio en los días de Semana Santa,  apareció un artículo que hacía referencia al nacimiento y muerte de Jesús y sobre la siempre controversial duda sobre lo exactas, o no, de las fechas que celebra el Cristianismo.

Más allá de lo interesante del tema, y que mucho me temo no tendrá fácil explicación (Aún hay dudas sobre lo que pasó ayer, imaginemos hace dos mil años), sobre todo porque gran parte de las "pruebas" vienen de la tradición oral,  lo que realmente importa es el fondo.

Habría que hacer notar, eso sí, que han sido las Iglesias cristianas las que han ayudado a mantener la controversia al insistir, sobre todo la Iglesia Apostólica y Romana, más en las formas y los elementos mágicos más que en contenido. La mitología cristiana ha predominado sobre su fondo. No hay mucha controversia sobre la vida de Buddah o Mahoma, ni siquiera sobre la mitología Hindú. Estas se han centrado más sobre sus mensajes, que en la veracidad de los hechos históricos. Es como si el cristianismo constantemente debiera homologar sus creencias con hechos fantásticos.

No recuerdo quién lo dijo, pero es muy cierto: "Si Jesús no hubiese existido, habría que haberlo inventado". El amor, la compasión, la igualdad son valores universales y no debería hacer falta creer que Jesús caminara sobre el agua, multiplicara panes o resucitara muertos, como si se tratase de un David Copperfield cualquiera. 

Cuando la Iglesia se decida a desmitificar el cristianismo, aparecerá el verdadero sentido de la religión. Quizás signifique, eso sí, que la institución se transforme o simplemente desaparezca, pero lo que es cierto es que, más allá de las promesas de vida eterna, el ser humano precisa guías que permitan la continuidad y progreso espiritual de la especie.

Celebro entonces, a los que aún dudando de la veracidad histórica de Jesús, o de la mitología cristiana, se quedan con el contenido. Con el verdadero contenido.

Somos Terceros-

"Cuando termina un torneo, o un campeonato, sólo nos acordamos del vencedor. Pocas veces del segundo, y nunca del tercero"

-Sabiduría deportiva.

Según la Real Academia de la Lengua, Colusión es un pacto ilícito en daño de tercero.

Y lo traigo a colación porque es la palabra de moda en Chile. Hemos descubierto el término, aunque su práctica ha estado ampliamente en efecto desde hace miles de años.

Lo que sí es nuevo es mi propia realización que "tercero" soy yo, sí, sí, y usted también. Y por esto fui al diccionario para buscar una palabra que definiera al que es víctima de una colusión, pero no la encontré. Así que tendremos que quedarnos con "terceros". Terceros somos las víctimas de una colusión.

Supongo que esto significa que un equipo de fútbol que salga tercero en un campeonato ha sido víctima de colusión por parte del primero y el segundo. Si el Lunes es el primer día de la semana, el miércoles es el día de la colusión y Marzo, el mes de la colusión.

Cuando el Estado me cobra impuestos y no veo ninguna ventaja en ello, ¿Con quién se colude el estado?

Habría que crear una Asociación de Terceros, es decir, una asociación que agrupe a víctimas de las innumerables colusiones por parte de políticos, gobernantes, multinacionales, empresas de la construcción,  etc...O,¿ Cree usted que las farmacias son las únicas que coluden?.

El famoso Seguro Obligatorio, dice en una de sus cláusulas, "cualquier tercero afectado".¿Me protege este seguro contra actos de colusión?

El Tercer Mundo, ¿Es el mundo de las víctimas de  colusión?

Los Encuentros cercanos del Tercer tipo, ¿Serán experiencias de colusión?

De pronto, ser "tercero" se convierte en algo dramático, una víctima de acciones terribles que no traen nada bueno para el que no es ni el primero ni el segundo, que son, obviamente, los que coluden.

Por algo, nuestro planeta es el tercero en el Sistema Solar. ¿Será que también fue víctima de una colusión?

Lo importante es que repitamos muchas, muchas veces el término colusión, así se nos hace absolutamente normal en nuestra vida diaria, hasta que no tenga ninguna importancia y así, los que coluden, puedan seguir haciéndolo impunemente. Total, hagamos lo que hagamos, seremos terceros.

¿ Santa Crisis ?

"La repetición constante lleva a la convicción"

-Robert Collier

"Cualquier idea, propósito o plan, se siembra en la mente a través de la repetición"

-Napoleón Bonaparte

Me encontré con un afiche que leía: "Vivir Semana Santa en tiempos de Crisis" y me vinieron a la mente mis años en Argentina, cuando se sucedían robos de bancos, atentados y persecuciones armadas a diario. Siempre que miro atrás, no me deja de sorprender lo acostumbrados que estábamos a todo esto, y de como se pierde la capacidad de asombro.

En este último año, la palabra "crisis" debe ser, por lejos, la más repetida en los medios de comunicación y por consiguiente, la más utilizada en cualquier conversación.

El mundo del comercio rápidamente la está usando para productos que intentan mostrarse, ya sea por precio o por sus características, como los más atractivos en "tiempos de crisis". 

Se habla tanto de la crisis, que es difícil imaginarse que vivíamos en un mundo sin ella. 

Una vez más, el sistema ha logrado incorporar un concepto al subconsciente colectivo, permitiéndole libertad de acción sin mayor interferencia ni resistencia. Si algo está mal, es porque estamos en crisis. Como si se tratara de un fenómeno de la naturaleza, como un huracán o un terremoto, donde no hay responsables tangibles. Pero SI los hay y son los mismos que un día se postularán como los salvadores de la crisis. 

La Iglesia no es excepción y se une al uso repetitivamente perverso de la palabra, convocando a sus feligreses con "Vivir Semana Santa en tiempos de crisis". Supongo que nos dirán que no nos preocupemos por las cosas materiales, que lo importante es la vida espiritual y nuestro camino al más allá. Mientras tanto, siguen llegando las cuentas y OTROS, desalmados e infieles, siguen sacando ventajas de la tan mentada crisis. La historia, no me canso de decirlo, se repite.

La mentira siempre tiene elementos de verdad, es como una aspirina recubierta y en esto, el sistema es maestro.

La imagen del día.

"Nunca pienses que una guerra, por necesaria que sea o por cuán justificada esté, no sea un crimen"

-Ernest Hemingway

Si ya es difícil explicarle una guerra a alguien, mucho más explicárselo a un niño. Este niño, como tantos otros, debería estar en el colegio, jugando con sus amigos o comiendo un helado.¿Cómo será su vida después de esto?

Afortunados los que leemos de esto a la distancia, pero no nos equivoquemos, situaciones como esta están sucediendo AHORA en algún lugar de nuestro planeta. Alguien, cómodamente sentado en un escritorio y tomándose un café, ha decidido que una guerra "vale la pena". Las palabras a veces matan.

Fútbol de altura.

"Guerra avisada, no mata soldado"

-Dicho popular venezolano.

No sé si es una anécdota real, pero es muy buena. Se cuenta que un vendedor de la antigua CBS, que se ocupaba del estado de Illinois,  perdía un sombrero cada vez que visitaba Chicago, a causa de los fuertes vientos-decía él- y lo ponía en su relación de gastos. Un día, el gerente financiero de la compañía, le dijo que no podía seguir haciendo esto, y que el sombrero debía salir de su bolsillo.

Meses más tarde, el financiero lo llamó y lo felicitó por no incluir más sombreros en su cuenta de gastos, a lo que vendedor le dijo: "Usted no lo ve, pero el sombrero está".

Aunque no se hable de la altura, la altura está.

Hace años, durante una convención en la localidad de Veil, Colorado, nos podíamos anotar para realizar alguna actividad de "ocio". Ingenuamente, me anoté en fútbol. Obviamente, había desestimado la información contenida en el maravilloso libro sobre Veil que estaba en cada habitación, donde decía que estaba a poco más de 3.000 metros sobre el nivel del mar. Cinco minutos después de haber empezado el "partidillo", pensé que me iba a morir. 

Claro que no soy atleta, pero los 3.600 metros de Nuestra Señora de La Paz, tienen que pegar como patada de mula. Y eso que Maradona había defendido a La Paz, ante la arremetida de la FIFA de excluirla como sede válida de las eliminatorias a los mundiales. Confieso, yo también. Más como una postura política que por convencimiento deportivo. El "Aquí vivimos, aquí jugamos" tiene sentido, y debe ser respetado, pero eso no significa que el problema no exista.

No por nada, los mayores logros futbolísticos de Bolivia, han sido conseguidos en las alturas.

Los jugadores rioplatenses, tal vez debido a su dieta alta en proteína animal(?), son los que más sufren los efectos de la altura , pero de todas maneras, habría que preguntarse si, ante este hecho absolutamente conocido, no habría que haber tomar ciertos recaudos. Aquí algunas sugerencias:

1- No presentarse.

2- Nacionalizar a 23 bolivianos y tenerlos exclusivamente para estas ocaciones.

3- Convencer a jugadores como Messi, Zanetti, Tevez, Gago, etc...que dejen a sus clubes un mes antes antes de cada partido y que vivan  en La Paz, o en Veil.

4- Incorporar pequeñas bombonas de oxígeno al "short".

5- Ofrecer una "prima" extraordinaria por ganar en La Paz.

6- Ofrecer una "prima" extraordinaria por IR a La Paz.

7- Incorporar a la dieta de los jugadores té de coca (sólo té).

8- Efectuarles hipnosis ANTES de los partidos ("La altura no existe").

9- Ofrecerle a la Federación Boliviana una "prima" extraordinaria por cambiar su sede a Cochabamba.

10- Ir a La Paz, jugar algo de fútbol, y tratar de sacar un resultado digno.

Pero ante la evidencia de los resultados, también haría algunas recomendaciones a los bolivianos:

1- Organizar un Mundial de Fútbol.

2- Organizar unas Olimpíadas.

3- Organizar mundiales de Hockey, Basket, Rugby, Polo y Ajedrez, entre otros.

4- Cerrar el aeropuerto de La Paz hasta el día mismo de los compromisos deportivos.

5- Tratar de embotellar la altura y llevarla a donde vayan a jugar.

Aunque no hablemos más de la altura, la altura está.